jueves, 21 de agosto de 2008

RESISTENCIA CIVIL ENTREGA CARTA EN LA EMBAJADA DE ESPAÑA


Boletín de Prensa, jueves 21 de agosto de 2008

Organizaciones de la Sociedad Civil entregan carta al embajador de España en México

· Solicitan deslindar públicamente a su país del apoyo que la vicepresidenta Fernández de la Vega dio a una de las partes que integran la discusión sobre la soberanía energética mexicana.

· Entre las organizaciones firmantes figuran la Liga Nacional de Comités Ciudadanos en Resistencia A. C., Flor y Canto, el Colectivo 2 de julio, el Grupo Estudiantil y Popular en Defensa del Petróleo de la ENAH y los Círculos de Estudios Redes Universitarias y Buzón Ciudadano.

Diversas organizaciones de la sociedad civil mexicanas asistieron pacíficamente este jueves 21 de agosto a las 12.00 horas a la embajada del Reino de España en México a fin de entregar una carta dirigida al embajador Carmelo Angulo Barturen, para solicitar diplomáticamente a España se deslinde de las declaraciones de la Vicepresidenta María Teresa Fernández de la Vega Sáenz, en el sentido de que el gobierno español apoya la iniciativa de reforma energética propuesta por Felipe Calderón.

A las puertas de la embajada el Consejero de Asuntos Internos, en representación del embajador Angulo, recibió la misiva por parte de una comisión las organizaciones, Liga Nacional de Comités Ciudadanos en Resistencia A. C., Flor y Canto, el Colectivo 2 de Julio, el Grupo Estudiantil y Popular en Defensa del Petróleo de la ENAH, los Círculos de Estudio Redes Universitarias y Buzón Ciudadano, en ella se juzgan las declaraciones de la vicepresidenta como intervencionistas y atentatorias contra el principio de la Libre Autodeterminación de los Pueblos.

Posteriormente, Ferrer Galván presidente de la Liga Nacional de Comités Ciudadanos en Resistencia, leyó la carta ante aproximadamente 200 integrantes de las organizaciones sociales.

“El Estado español, debe ser ajeno y respetuoso de la decisión soberana que tomemos sobre la industria petrolera; las declaraciones de la vicepresidenta española en las que afirma que el presidente José Luis Rodríguez Zapatero, jefe de gobierno de España, “apoya” la iniciativa de reforma energética de quienes gobiernan de facto en México, nos parecen excesivas e intervencionistas.” expusieron en el texto.

La carta también expresa el reconocimiento al legado histórico de Lázaro Cárdenas del Río quien decretó la expropiación petrolera y fue defensor del gobierno legítimo español durante el golpe militar de 1936:

“(…) legado de autodeterminación y solidaridad internacional que el siglo pasado unió con tanto provecho al pueblo español y al mexicano.

“Por ello no deja de ser sorprendente que su gobierno a través de su Vicepresidenta María Teresa Fernández de la Vega Sáenz venga a nuestro país como portavoz de las empresas trasnacionales españolas (…) e, invadiendo ámbitos de nuestra soberanía, se convierta en una voz de presión que acorrale la autodeterminación del pueblo mexicano.”

La “nota diplomática del pueblo de México y de las organizaciones de la sociedad civil” solicita al embajador español “se tomen las medidas necesarias para deslindar públicamente a su país del apoyo, como la vicepresidenta Fernández de la Vega lo afirmó, a una de las partes que integran la discusión sobre la soberanía energética mexicana”.

Al tiempo que la carta era entregada, en las puertas de la embajada española activistas de la Escuela Nacional de Antropología e Historia realizaban actividades culturales en las que resaltaban la voracidad de las trasnacionales españolas en América Latina.

Durante el acto las organizaciones expresaron su solidaridad con los deudos y se unieron a la pena por el fallecimiento en un accidente aéreo de 150 españoles en Madrid, ocurrido en la víspera.

A continuación se reproduce el texto completo de la Carta entregada por las organizaciones de Resistencia Civil Pacífica:

México, D. F., 21 de agosto de 2008

EXCMO. CARMELO ANGULO BARTUREN

EMBAJADOR EXTRAORDINARIO Y PLENIPOTENCIARIO

DE ESPAÑA EN MÉXICO

PRESENTE

Apreciable Embajador:

Quienes suscribimos la presente carta somos integrantes de diversas organizaciones de la sociedad civil en México, activistas sociales comprometidos con la democracia, la soberanía y la libre autodeterminación de los pueblos, valores propios de la diplomacia y las relaciones internacionales que siempre han caracterizado a nuestro país.

Como usted lo sabe, los mexicanos somos un pueblo que a lo largo de su historia independiente ha procurado el justo equilibrio interno con las responsabilidades mundiales; somos adherentes a una gran cantidad de acuerdos, protocolos y tratados internacionales con los que profesamos las doctrinas que enaltecen el dicho de un gran hombre mexicano, Benito Juárez García: “entre los individuos como entre las naciones el respeto al derecho ajeno es la paz”.

La Libre Autodeterminación de los Pueblos y la No Intervención son principios irrenunciables para cualquier país. Los mexicanos conocemos la experiencia del intervencionismo, no sólo militar y económico sino aquel que se da mediante múltiples modalidades de presión extranjera en aras de influir nuestra determinación nacional y sujetarla a los intereses foráneos.

Justamente nuestro país atraviesa por uno de esos momentos. Como es de su conocimiento el señor Felipe Calderón Hinojosa presentó ante el Congreso de la Unión siete iniciativas de reforma a diversas disposiciones legales y reglamentarias con las que pretende modificar el estatus de exclusividad que el Estado mexicano tiene desde 1938 sobre la industria petrolera.

Es un tema que ha dividido al país, que ha polarizado al gobierno con su pueblo y que ha generado un gran debate nacional. La iniciativa de Felipe Calderón no sólo contraviene las leyes y reglamentos que pretende modificar sino también contradice a la Constitución, base contractual del Estado mexicano y trasgrede la voluntad popular y el sentir tradicional de nuestro pueblo.

Nuestro país está tomando, por todos los medios institucionales y populares, una decisión trascendental, no ajena de presiones internacionales y comerciales. La decisión que tome nuestro país puede repercutir en la forma en que el propio pueblo concibe a su gobierno y sus relaciones comerciales, por ello debe estar desprovista de cualquier forma de intervencionismo.

En 1938, el presidente Lázaro Cárdenas del Río, decidió mediante el Decreto Expropiatorio de la industria petrolera nacional, dotar a México de soberanía energética y financiera. Para los mexicanos, el legado de Lázaro Cárdenas es motivo de orgullo pues no sólo contuvo las presiones comerciales y políticas sino que además fue vanguardista en el terreno de la diplomacia.

El presidente Cárdenas reflejó el sentir nacional rigurosamente en todos los aspectos del Estado, incluso en aquel momento histórico en el que en la Liga de las Naciones, el representante mexicano defendió con vehemencia el derecho a la autodeterminación española y se exigió que el mundo entero protegiera y apoyara al gobierno legítimo que estaba siendo golpeado por el autoritarismo y por la apatía internacional. El pueblo mexicano, dio al mundo una lección de diplomacia y solidaridad con el pueblo hermano de España en cuyo territorio el imperialismo estaba gestando una de las etapas que mayor vergüenza causa a la humanidad.

Hoy, el gobierno mexicano considera borrar de un plumazo el legado de Lázaro Cárdenas, ese legado de autodeterminación y solidaridad internacional que el siglo pasado unió con tanto provecho al pueblo español y al mexicano.

Por ello no deja de ser sorprendente que su gobierno a través de su Vicepresidenta María Teresa Fernández de la Vega Sáenz venga a nuestro país como portavoz de las empresas trasnacionales españolas, más representativas del franquismo y la monarquía que del ideal republicano e, invadiendo ámbitos de nuestra soberanía, se convierta en una voz de presión que acorrale la autodeterminación del pueblo mexicano.

Las organizaciones que nosotros representamos no podemos sino avergonzarnos de este capítulo. El Estado español, debe ser ajeno y respetuoso de la decisión soberana que tomemos sobre la industria petrolera; las declaraciones de la vicepresidenta española en las que afirma que el presidente José Luis Rodríguez Zapatero, jefe de gobierno de España, “apoya” la iniciativa de reforma energética de quienes gobiernan de facto en México, nos parecen excesivas e intervencionistas.

En el debate sobre el destino de la industria petrolera nacional, los mexicanos no aceptamos presiones, recomendaciones o apoyos de ningún tipo, ya sea de gobiernos extranjeros o de empresarios trasnacionales.

Las declaraciones de la vicepresidenta Fernández de la Vega atentan contra el principio de la libre autodeterminación y la no intervención.

Por ello, valga esta carta como una nota diplomática del pueblo de México y de las organizaciones de la sociedad civil, para que a través suyo, señor embajador, o el medio que ustedes consideren conveniente, se tomen las medidas necesarias para deslindar públicamente a su país del apoyo, como la vicepresidenta Fernández de la Vega lo afirmó, a una de las partes que integran la discusión sobre la soberanía energética mexicana.

Le agradeceremos pueda responder a nuestra petición y nos despedimos de usted reiterándole nuestras más distinguidas consideraciones

ATENTAMENTE

Ferrer Galván Acosta

Presidente

Liga Nacional de Comités Ciudadanos en Resistencia A. C.

Froylán Yescas Cedillo

Coordinador

Flor y Canto

Lorena Sosa Hernández

Coordinadora

Colectivo 2 de Julio

Manuel Otero

Coordinador

Redes Universitarias

Antonio Villegas

Coordinador

Círculo de Estudios Buzón Ciudadano

Hania Sánchez Santiago

Grupo Estudiantil en Defensa del Petróleo de la Escuela Nacional de Antropología e Historia