jueves, 19 de julio de 2007

REFLEXIONA

Estamos listos para todo

En ocasiones pensamos en el caos, y nos viene a la mente lugares remotos como el África meridional, los países árabes, Israel o Venezuela, la televisión emite imágenes de violencia desmedida que nos asombra y aterra, quien pudiera pensar que esas imágenes son hoy por hoy el pan de cada día de nuestra sociedad, si, es aquí en nuestra tierra, cuyo suelo se estremece al son de las armas de fuego y cuerpos que caen derribados por estas; el deseo de poder es solo eso, la ambición desmedida de un grupo de seres humanos a costa de la vida ajena, una vida la cual nos ha entregado Dios y solo el puede privarnos de ella.

¿Cuanto puede valer una vida humana?

Será acaso 1 diputación, 1 senaduría o 1 gobernatura…. No sabría decirlo pero, una vida no tiene precio y su valor es incuantificable, Podría usted pensar mi casa costo 2 vidas, mi auto solo 1 vida y mi ropa un par de vidas mas; quizás no, pero para personas con el corazón de Ulises Ruiz, Mario Marín Torres o Eduardo Robinsón Bours quizás si, y es que ellos han basado su poder y su estatus económico a costa de la vida de otros, todo sea por perpetuarse en el poder, todo sea por la comodidad que dan los bienes económicos, y todo aquel que atente contra ellos debe sucumbir, como buen cristiano estoy en la creencia que después de la vida material se acaba todo aquello que se acaparo durante una vida de tiranía.

Una persona, una vida, fue una infancia feliz o infeliz, fue el lugar de ilusiones y sueños, una vida es el lugar de alegrías y tristezas, fue el cotidiano amanecer del alba y el caer de las tardes, fueron noches estrelladas, fueron eternos días en compañía de la familia y de los seres queridos, todos aquellos sucesos que rodearon esa vida, que en un abrir y cerrar de ojos fue finiquitada, por una arma cuyo ejecutor, responde a las ordenes del poder como todo buen lacayo, quizás un día este ejecutor por su buen trabajo pudiera ser dictador de la republica o empresario “exitoso”, pues ha cumplido con las peticiones de sus patrones.

¿Puede alguien decir NO al poder?

Posiblemente si, pero son pocos, cuantos de nosotros desearíamos la comodidad que dan los bienes económicos, quizás todos, pero no a costa de la vida ajena.

Reflexionando hoy he palpado a mi gente, que tienen que levantarse temprano para laborar, son ellos quienes sobre quienes ya descansan largos años de labranza, lo demuestran sus cansados pasos, sus cabelleras plateadas y sus ojos empañados por el pasar de la edad; aun así hay que ponerse el sombrero, los viejos harapos ya muy gastados y los guarachitos que siempre están presentes en nuestra gente, a un cuando las inclemencias del clima ameritaran quedarse en casa a contemplar el día, la necesidad no lo permite, y es así, en país sin corazón donde el prójimo pasa a segundo termino y cada quien mira por sus intereses, que mujeres, niños y ancianos tienen que laborar en condiciones por demás desfavorables y en muchos casos lugares donde no hay ninguna garantía de no salir lesionado, la tristeza me embarga al recordar a los familiares de los ya fallecidos mineros, de mina de pasta de conchos, en su desesperación ellos solo querían recobrar los cuerpos de sus seres amados que quedaron destrozados dentro de aquella peligrosa mina; era bien sabido que las condiciones eran por demás precarias, aun así la corrupción por del poder dio el visto bueno para realizar los trabajos en esas condiciones tan alarmantes, grandes empresarios hicieron negocios muy jugosos, pero las vidas esas ya no podrán ser nunca restauradas, pensaría aquel niño que miraba la vida con tanta ilusión, y con aquel hambre y deseo de vivir que moriría aplastado por una montaña de rocas… posiblemente nunca, pensaría aquella madre que le vio nacer y crecer que nunca volvería a ver a su primogénito tras la labranza de ese día… posiblemente tampoco.

México, por México y para México, por un futuro lleno de esperanzas, el tiempo es hoy, hoy es el día para cambiar esta sociedad, pero esta sociedad no cambiara si tu no cambias.

ULISES RUIZ DEBE RENUNICIAR Y AFRONTAR A ESTA SOCIEDAD QUE DEMANDA JUSTICIA.